El presidente francés, Jacques Chirac, insistió ayer en la necesidad de que Turquía aporte "clarificaciones" sobre su posición respecto a Chipre, aunque aseguró que Francia respetará los compromisos adquiridos con Ankara. Debido a "la declaración unilateral sobre Chipre, Turquía deberá aportar clarificaciones y ofrecer garantías a la Unión Europea (UE) de su voluntad de respetar plenamente sus obligaciones", declaró el jefe del Estado francés en el discurso de apertura de la conferencia anual de embajadores de Francia.

Turquía firmó el pasado 29 de julio un acuerdo que extiende la unión aduanera a la República de Chipre, como exigía la UE, pero Ankara adjuntó al documento una declaración que precisa que su gesto no equivale a un reconocimiento de Chipre, que es miembro de la Unión Europea desde el año 2004.

A cinco semanas de la apertura de las negociaciones para la adhesión, Chirac denunció la actitud del Gobierno de Turquía que "no se sitúa en el espíritu que se espera de un candidato a la Unión", en el encuentro con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso. La Comisión recordó ayer, sin embargo, que Turquía no está obligada a reconocer a Chipre para iniciar las negociaciones de adhesión.

CERCA DE LAS DECISIONES Tres meses después del rechazo a la Constitución Europea, el presidente francés abogó ayer ante el pleno del cuerpo diplomático por una "nueva adhesión de los ciudadanos al proyecto europeo". En el debate sobre el futuro de la UE, Chirac prometió defender una Europa "política, ambiciosa, social y solidaria". "Necesitamos proponer a los franceses otra manera, más democrática, de construir Europa, y que les asocie mejor a las decisiones" que influyan en su futuro, remarcó el dirigente conservador, al constatar que el no francés de mayo exige construir "un nuevo consenso".

Al pasar revista a la actualidad internacional, el presidente evocó el impulso "irresistible" de reformas en Oriente Próximo y, con motivo de la cumbre del 10º aniversario del proceso de Barcelona, pidió "una nueva solidaridad" entre las dos orillas del Mediterráneo. En el contencioso sobre el programa nuclear iraní, el jefe del Estado francés exhortó a Teherán a optar por la "cooperación" con los europeos.