Hoy vence el ultimátum dado por los secuestradores para matar a los cuatro rehenes cristianos occidentales que retienen desde hace dos semanas en Irak. Clérigos sunís aprovecharon ayer viernes, día de la plegaria en el mundo musulmán, para pedir su liberación.

Los rehenes son el británico Norman Kember, el estadounidense Tom Fox y los canadienses James Loney y Harmeet Singh Sooden. Todos son miembros del Grupo de Pacifistas Cristianos, opuesto a la invasión.