La jornada de protesta social convocada por los sindicatos coincidió ayer con la visita de una delegación del Comité Olímpico Internacional (COI) a la capital francesa para evaluar la candidatura de París a la organización de los Juegos en el 2012, que se disputan también Madrid, Londres, Nueva York y Moscú. La coincidencia --"puramente accidental", según los organizadores-- no afectó a la visita de los miembros del COI, que sí fueron testigos del caos circulatorio que se originó.

Para no perturbar la visita de la delegación olímpica, los sindicatos modificaron el recorrido de las marchas y utilizaron las protestas para expresar su apoyo a la candidatura parisina, con camisetas, gorras y banderolas con el logotipo de París 2012. Sin embargo, la calidad de los transportes públicos es uno de los criterios de evaluación más importantes para el COI y lo menos que se puede decir es que Francia estaba ayer prácticamente paralizada.

TRAFICO AEREO El tráfico en los aeropuertos parisinos estuvo reducido por la mañana al 25% de los vuelos y la media de los retrasos fue de 45 minutos. En la capital, metros y autobuses quedaron colapsados. Los trenes regionales funcionaron sólo al 50%. Sólo las líneas internacionales Eurostar (París-Londres) y Thalys (París-Bruselas) funcionaron casi con normalidad. El tráfico marítimo a través del Canal de la Mancha también fue interrumpido.

Las manifestaciones en París provocaron un caos circulatorio que los miembros del COI no pudieron ignorar pese a los esfuerzos de los organizadores de no molestar durante la visita de lo que será la villa olímpica, situada en el barrio de Batignolles, en el noroeste de la capital.