El vídeo de la ejecución del civil estadounidense Nick Berg en manos de radicales iraquís conmocionó a la sociedad estadounidense, que se pregunta si Sadam Husein era realmente un peligro para ellos y si valía la pena entrar en esa guerra. En una breve declaración a la prensa, el presidente aseguró que los responsables de la decapitación del joven, de 26 años, quieren "debilitar" la determinación de EEUU en llevar la democracia a Irak. Los padres han responsabilizado a las tropas de EEUU de su muerte.

Berg, propietario de una empresa especializada en instalar antenas, estuvo detenido entre el 24 de marzo y el 6 de abril por la policía iraquí de Mosul. Los padres se pusieron en contacto con el Departamento de Estado y se quejan de que no les informaran ni les ayudaran.