Otto Warmbier, el estudiante estadounidense que en enero del año pasado fue detenido en Corea del Norte y condenado dos meses después a 15 años de trabajos forzados por intentar arrancar un póster propagandístico en un hotel ha sido liberado y está volando de regreso a Cincinnati (Ohio). Según han declarado los padres del joven de 22 años a The Washington Postse ha tratado de una "evacuación médica" pues Warmbier, según los padres, está en coma desde hace más de un año. El secretario de Estado, Rex Tillerson, que ha confirmado en Washington la liberación, no ha mencionado la condición médica del joven.

En un comunicado, Tillerson ha explicado que "por dirección del presidente (Donald Trump) el Departamento de Estado ha asegurado la liberación de Otto Warmbier de Corea del Norte" y ha informado de que está "de camino a EEUU, donde se reunirá con su familia". También ha asegurado que "por respeto a la privacidad del señor Warmbier y su familia" no habrá más comentarios públicos por su parte sobre el caso.

ACTO "HOSTIL" CON "CONNIVENCIA" DE WASHINGTON

Warmbier era un estudiante de económicas en la Universidad de Virginia que, con 21 años recién cumplidos, viajó en navidad de 2015 a Corea del Norte en un tour organizado. A finales de enero Pyongyang anunció que había sido detenido, acusado de intentar robar en nochevieja en una planta del hotel Yanggakdo con acceso restringido solo para empleados un póster propagandístico. Le acusaron de cometer un acto "hostil" contra el estado "con la connivencia tácita del gobierno de Estados Unidos y bajo su manipulación". En marzo de 2016 fue juzgado por el tribunal supremo norcoreano y, tras solo una hora de proceso, fue condenado a 15 años de trabajos forzados por lo que el tribunal llamó "un crimen conforme a la política hostil del gobierno de EEUU (hacia Corea del Norte), en una apuesta por perjudicar la unidad de su pueblo tras entrar como un turista".

Antes del juicio, Warmbier habló entre lágrimas pidiendo compasión. "Cometí el peor error de mi vida", dijo en su declaración.

EN COMA Y SIN CONTACTO

Los padres de Warmbier han explicado al Post que fueron informados de que poco después de ese juicio su hijo había contraido botulismo, por lo que le dieron un somnífero del que nunca despertó y, también según la versión norcoreana, ha estado en un coma desde entonces, aunque es imposible comprobar la veracidad de esa información ni saber nada sobre el cuidado o las atenciones médicas que ha recibido Warmbier. Diplomáticos de la embajada de Sueciaen Corea del Norte, que suelen actuar como intermediarios de Estados Unidos ante la falta de relaciones diplomáticas entre Washington y Pyongang (donde solo 24 países tienen legaciones), tuvo contacto con el joven por última vez el 2 de marzo del año pasado, antes del juicio.

En su comunicado Tillerson ha informado de que su departamento "sigue manteniendo discusiones con la República Popular Democrática de Corea respecto a otros tres ciudadanos estadounidenses declarados detenidos". De lo que no ha dado información es sobre las negociaciones que han llevado a la liberación de Warmbier. Se sabe que en ellas ha realizado gestiones Bill Richardson, que fue gobernador de Nuevo México y embajador ante la ONU para Bill Clinton y que a lo largo de su años de trabajo como negociador para distintas Administraciones ha realizado al menos ocho viajes a Corea del Norte.

Pyongyang tradicionalmente solía retener a detenidos estadounidenses (de los que ha habido cerca de una docena en los últimos seis años) hasta que altos cargos se encargaban personalmente de las negociaciones. Clinton viajó personalmente a la península en 2009 para asegurar la liberación de las periodistas Euna Lee y Laura Ling.