El cardenal Bernard Law, acusado de haber encubierto a sacerdotes que practicaban la pederastia, ofició ayer una de las misas de los nueve días de duelo por la muerte de Juan Pablo II. El purpurado estadouniense, que hizo caso omiso a las protestas, celebró la liturgia ante una congregación en la que estaban dos víctimas de dichos abusos.

Barbara Blaine y Barbara Dorris habían llegado ayer a Roma, desde Chicago, para mostrar el disgusto de los más de 5.000 miembros de la asociación Red de Supervivientes de Abusados por Sacerdotes. "Creemos que no había que haberle pedido a Law que oficiara la misa y que, una vez hecha la petición, el cardenal debía haberla rechazado", dijo Blaine. "Los cardenales estadounidenses debían haberlo evitado", añadió.

"Estamos aquí para hablar por todas las víctimas, para que no se sientan intimidadas por el silencio", explicó Dorris. Ambas mujeres fueron víctimas de abusos sexuales en su adolescencia. "Intentamos recuperarnos del trauma y evitar que otras personas resulten heridas", dijo Blaine. La decisión de encargar la celebración a Law, según Blaine, "sólo añade sal a la herida".

Las dos mujeres hicieron estas declaraciones en la plaza de San Pedro, en medio de los empujones de la policía que, temerosa de que se produjera algún altercado, las obligó a salir del perímetro del Vaticano. Al final, fue la policía quien las escoltó al interior de la basílica. Blaine y Dorris manifestaron su interés en asistir a la ceremonia y aseguraron que no querían provocar a nadie.

RETIRO DORADO Mientras era arzobispo de Boston, Law encubrió a numerosos sacerdotes implicados en casos de pederastia. Cuando el escándalo estalló, en el 2002, el Vaticano decidió apartarlo de la diócesis y le trasladó a Roma, donde fue nombrado arcipreste de Santa María la Mayor, una de las grandes basílicas romanas, y donde vive un retiro dorado.

Law, que antes de que estallara el escándalo era considerado papable, contó ayer con otros concelebrantes considerados papables: Giovanni Battista Re y Norberto Rivera Carrera.