Decepción y desamparo. Son las dos sensaciones que transmiten los cuatro jóvenes españoles que, atrapados en Georgia los días más álgidos de los ataques de Rusia, intentaron, sin éxito, que el Ministerio de Exteriores o personal diplomático en Tiflis, la capital, les diera alguna orientación. Benet Gutiérrez, de 28 años, acompañado de Anna, Francesc y David, todos de Barcelona, que viajaron a Georgia para escalar el monte Kazbek, de 5.035 metros, lograron salir del país por vía terrestre a través de Armenia.