Al menos cinco personas, cuatro israelís y una suicida palestina, han muerto cuando la mujer ha hecho estallar los explosivos que portaba en el puesto fronterizo de Erez, que separa a la franja de Gaza del territorio israelí.

Otras siete personas, aparentemente todas israelís, han resultado heridas en el ataque.

Hamás se ha atribuido el ataque en Erez, que se ha registrado cuando centenares de obreros palestinos pasaban para trabajar en Israel, según fuentes militares.

Las autoridades militares han cerrado temporalmente esa frontera que separa a la franja de Gaza del territorio israelí, y por la cual habían pasado esta madrugada miles de obreros palestinos que se ganan la vida en Israel en granjas del sur y en Tel Aviv.

Fuentes palestinas extraoficiales ha informado de que la suicida podría haber salido para su misión desde el pueblo de Bet Laghya, situado en el norte de la franja de Gaza.