Un gran número de palestinos se concentra en el paso fronterizo de Rafah, entre Gaza y Egipto, al recrudecerse las hostilidades entre los islamistas de Hamás y las fuerzas de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y de Al Fatah. Testigos presenciales señalan que se trata de personas que intentan salir de Gaza por temor a la escalada de la violencia, que se ha cobrado un gran número de víctimas entre civiles inocentes.

De momento se ignora si el paso, cerrado desde el pasado sábado, se abrirá, para lo que sería necesario un acuerdo previo entre la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Israel y funcionarios de la Unión Europea (UE), que supervisan la seguridad. La presencia palestina, imprescindible en el paso fronterizo, pertenece a la Guardia del presidente Mahmud Abás, uno de los organismos de seguridad de la ANP contra los que los islamistas han lanzado hoy una amplia ofensiva en su enfrentamiento con la milicia de Al Fatah.

La población palestina de Gaza ha quedado virtualmente atrapada en medio de una guerra civil "de facto" en este pequeño territorio de 330 kilómetros cuadrados pues sus fronteras están hoy selladas. La única salida al exterior a la que tienen acceso el millón y medio de habitantes de Gaza es el paso fronterizo de Rafah, por donde pueden viajar a Egipto y, desde allí, a otros países.

El paso de Rafah, bajo supervisión de las fuerzas de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y de 70 funcionarios de la Unión Europea (UE), ha estado cerrado hoy al recrudecerse los combates en los que la milicia islamista de Hamás parece haberse impuesto a los organismos de seguridad leales al presidente Mahmud Abás, y a Al Fatah.

Un portavoz de los representantes europeos, José Vericat, declaró a Efe que el paso de Rafah se abrió por última vez el pasado viernes, antes de la escalada de las hostilidades de los últimos dos días, y permanece cerrado desde entonces. El otro paso fronterizo es el de Erez, al norte de la franja de Gaza, controlado por el Ejército israelí, y al cual tienen acceso sólo palestinos con permisos especiales, como los que Israel suele conceder a enfermos que reciben tratamiento médico en sus hospitales, a obreros y a empresarios palestinos.

Otros tres pasos fronterizos entre Gaza e Israel, entre estos el de Karni, sirven exclusivamente para el paso de mercancías. Vericat indicó que desde la apertura del paso de Rafah, en noviembre del 2005, se han marchado de la franja de Gaza sin regresar unos 14.000 palestinos. Según fuentes del Ministerio del Interior de la ANP, el número de palestinos que emigraron de la franja de Gaza oscila entre 50.000 y "más de 200.000".