Los cinco etarras detenidos el martes por la Ertzaintza empezaron a prestar declaración ayer en la Audiencia Nacional. Los arrestados guardaban 40 kilos de material explosivo y todos los componentes necesarios para elaborar bombas. Según el Departamento vasco de Interior, los tres zulos --uno encontrado el jueves y los otros dos, el viernes-- estaban en una zona de monte cerca de Ondarroa (Vizcaya).

Los detenidos el martes son Ibai Iparragirre Burgos, Javier Zubizarreta Lejardi, Jon Iñaki Esnaola Alba, Xeber Uribe Beitia y Asier Badiola Lasarte. Según fuentes de la policía autonómica, integraban un comando al que se atribuye el atentado contra la comisaría de este cuerpo policial en Ondarroa, en septiembre del 2008, una acción inhabitual en la banda: lanzaron cócteles molotov para que los agentes salieran a la calle, lo que les hubiera expuesto al estallido de un coche bomba. Hubo 11 heridos, tres de ellos, erzainas. También se le atribuye los ataques a la sede de la Caja Vital en Vitoria y contra la maquinaria de empresas que participan en el construcción del tren de alta velocidad en Orio.

Según fuentes de la lucha antiterrorista, el comando estaba "durmiente" al haber perdido el contacto con la dirección de ETA en Francia a raíz de la detención de Garikoitz Azpiazu Txeroki y de Aitzol Etxaburu.

ROBERTO SAVIANO Además de explosivos, a los arrestados se les encontró marihuana y cocaína, sustancias para cortar esta droga y básculas de precisión. Había droga preparada en paquetes pequeños. Pruebas, en definitiva, de que los terroristas traficaban con drogas, un hecho que había sido denunciado varias veces pero que no suele contar con pruebas que lo sustenten. El periodista Roberto Saviano, experto en la Camorra, subrayó el viernes que esto confirma que existen lazos entre ETA y el narcotráfico.