Hasta noviembre del 2007 se habían recuperado 88 niños a quienes se les había suprimido la identidad durante la dictadura militar. Se calcula que hay más de 400 en la misma situación. El robo de bebés nacidos en cautiverio es un delito que no prescribe, por lo que se pudo procesar a varios represores antes de que se abolieran las leyes de impunidad. El juicio de ayer es el cuarto por apropiación de menores que se celebra en Argentina.