La derecha francesa oficializó ayer su refundación en un sólo partido, la Unión para un Movimiento Popular (UMP), que conserva las siglas de la Unión de la Mayoría presidencial, la plataforma que impulsó el propio presidente Jacques Chirac en vísperas de su reelección el pasado mes de abril. El exprimer ministro conservador y alcalde de Burdeos Alain Juppé, de 57 años, fue elegido presidente por dos años con el 79,42% de los votos de los militantes.
La UMP es el primer gran partido francés que pretende reunir en su seno a todas las sensibilidades de la derecha: conservadores, centristas y liberales. La formación tiene como modelo el Partido Popular español, cuyo presidente y jefe del Gobierno, José María Aznar, fue el telonero de honor del congreso fundacional que reunió en Le Bourget (afueras de París) a más de 15.000 militantes y 400 personalidades políticas internacionales.
EL POTENCIAL SUCESOR
Considerado como el sucesor potencial de Chirac para las presidenciales del 2007, Alain Juppé se declaró "satisfecho" al ver reunidos, por fin, a los neogaullistas del antiguo partido chiraquiano RPR (Agrupación para la República), los liberales de Democracia Liberal (DL) y un gran contingente de las filas de la Unión para la Democracia Francesa (UDF), de Fran§ois Bayrou. El exprimer ministro lanzó el mensaje de que en la derecha unificada caben todos: "No es simplemente una organización política lo que queremos construir, sino una comunidad de destino en la que reinará el respeto mutuo".
EL REPARTO DEL PODER
El reparto de poderes cristalizó en la elección como vicepresidente del liberal alcalde de Marsella, Jean-Claude Gaudin, mientras que el centrista alcalde de Toulouse, Philippe Douste-Blazy, recibía como premio por su traición a Bayrou la secretaría nacional de la nueva formación.
"La unión es la gran esperanza de las victorias futuras", insistió el primer ministro y antiguo centrista, Jean Pierre Raffarin, quien pidió el voto para Juppé y se esforzó por dar una imagen de unidad almorzando en la misma mesa con el nuevo presidente de la UMP y con el ministro del Interior, Nicolas Sarkozy. Raffarin, Juppé y Sarkozy aparecen ya como los futuros rivales con vistas a las próximas elecciones presidenciales del 2007.
La cuestión de la designación de la candidatura presidencial quedó fuera de los estatutos de la nueva formación. El tema se aplazó hasta el próximo congreso. Pero ya han aparecido los clubs de reflexión que prefiguran las corrientes en el seno del nuevo partido. El principal rival de Juppé a la presidencia, el diputado Nicolas Dupont Aignan, obtuvo un resultado inesperado (el 14,91% de los votos), con lo que podrá crear su propia corriente.
Otra nota discordante en esta fiesta de la unión fue la escasa participación en la votación, ya que sólo 45.000 de los 164.000 militantes censados, es decir el 29,28%, eligieron el presidente, el nombre y el logotipo del partido, que es un roble blanco sobre fondo rojo y azul.
