La Policía iraquí detuvo hoy a cuatro supuestos miembros de Al Qaeda que formaban una red especializada en ataques con artefactos explosivos, en las provincias de Bagdad y Kirkuk, en el norte del país, anunció el mando militar de EEUU. El Ejército estadounidense explicó, en un comunicado, que en una operación conjunta con agentes iraquíes en la zona de Karma, al oeste de Bagdad, fue arrestado un supuesto miembro de una célula especializada en atentados con coches bomba. El detenido está acusado de ser el responsable de los ataques lanzados el mes pasado contra edificios gubernamentales en Bagdad.

Durante la operación, llevada a cabo después de recibir informaciones de los servicios de inteligencia sobre el lugar donde se refugiaba el acusado, otra persona fue arrestada. En otra acción llevada a cabo en una zona rural al suroeste de Kirkuk, 250 kilómetros al norte de Bagdad, las fuerzas de seguridad conjuntas iraquí-estadounidenses detuvieron a un supuesto dirigente de Al Qaeda en Irak acusado de facilitar el movimiento de combatientes extranjeros dentro del país para perpetrar ataques. El sospechoso, que fue detenido junto a otra persona, está acusado, asimismo, de traficar y almacenar armas, según la nota.