Castrismo y anticastrismo, counismo y anticomunismo, revolución o muerte. El término medio escasea. Esta dicotomía, como no podía ser de otra forma, se traslada a la producción editorial sobre Cuba y genera libros bien curiosos. Como La hora final de Castro . La historia secreta detrás de la inminente caída del comunismo en Cuba (Javier Vergara Editor), un excelente análisis de Andrés Oppenheimer sobre las grietas que empezaron a resquebrajar el castrismo en los años 80 con las ejecuciones de compañeros de Fidel Castro, y después con la desaparición de la URSS, pero con conclusiones erróneas porque el autor entona con absoluta convicción el réquiem por el castrismo en una fecha tan lejana como 1992, cuando se publicó el libro.

Oppenheimer no contó con el increíble aguante de los cubanos, con la pertinaz ceguera de EEUU almantener el bloqueo, con la capacidad de Castro de manejar los tiempos ni con la aparición de la Venezuela de Hugo Chávez como sustituto económico de la URSS.

Para conocer la historia del país desde el siglo XVIII, cuando era un punto estratégico en el control del tráfico marítimo, hasta la consolidación del castrismo, Cuba, la lucha por la libertad (Debate), de Hugh Thomas saciará la curiosidad del lector, pero más que el país, es el personaje, o sea, Castro, quien despierta el interés y son muchas las biografías.

Indispensable

Pese a estar agotada y cubrir la historia hasta mediados de los años 80, sigue siendo de referencia la biografía publicada en 1986 por el periodista Tad Szulc, Fidel, un retrato crítico (Grijalbo). La que sí está en las librerías, y alcanza hasta fechas recientes, es La autobiografía de Fidel Castro (Destino), de Norberto Fuentes, que fue su confidente y jefe de los servicios secretos hasta caer en desgracia. Sus dos volúmenes constituyen un detalladísimo recorrido por la vida del líder revolucionario.

Fidel Castro: biografía a dos voces (Debate), del director de Le Monde Diplomatique Ignacio Ramonet, es un ejercicio hagiográfico hecho a partir de cien horas de conversaciones con el líder, como ya hicieron antes el periodista italiano Gianni Minà, el teólogo dominico Frei Betto y el exsandinista Tomás Borge.

Fidel Castro: la biografía definitiva del líder cubano (Martínez Roca), del periodista alemán Volker Skierka, ni cae en el elogio rendido ni en el derribo del biografiado. Estos retratos, como los discursos de Castro, tienen un alto número de páginas, cerca de 1.000 (los dos volúmenes de Norberto Fuentes suman 2.000). Un perfil mucho más sintético (176 páginas) es Fidel Castro (Swing), de Clive Foss. Como se ha visto, predecir el futuro de Cuba es arriesgado, pero plantear el debate es un ejercicio intelectual obligado. Desde el exterior, Marifeli Pérez-Stable lo intenta en Cuba en el siglo XXI. Ensayos sobre la transición , (Colibrí). Desde el interior de la isla lo hace el teólogo y sociólogo Félix Sautié Mederos en Socialismo y reconciliación en Cuba (Catarata).

La herencia intelectual

Cuba es tierra fértil para el arte y la intelectualidad. En Tumbas sin sosiego: revolución, disidencia y exilio del intelectual cubano (Anagrama), Rafael Rojas, con grandísima erudición, aborda el modo en que los intelectuales de la isla se enfrentaron a la victoria del castrismo en 1959 y cómo la cultura cubana dirime hoy los conflictos de la memoria derivados de aquel episodio traumático. En el libro, que le hizo merecedor del Premio Anagrama de Ensayo 2006, el autor traza además varios perfiles de intelectuales cubanos de ideología muy distinta como son Cintio Vitier, Guillermo Cabrera Infante, Herberto Padilla, Roberto Fernández Retamar o Raúl Rivero.

Una fotografía de las dificultades de la vida cotidiana en Cuba es Todos se van (Bruguera), deWendy Guerra, ganadora del primer Premio de Novela Bruguera 2006. A medio camino entre la ficción y el relato autobiográfico, es el diario de una niña que tiene 9 años en 1979 y que ingresa en una forzada madurez a los 20. El título de la obra es ya un retrato de la isla en la que la desencantada generación de la autora vive "entre lo prohibido y lo obligado", sin el "espíritu de unidad que hubo en los años 60". Sobre aquella década han novelado Senel Paz en En el cielo con diamantes (Ediciones B), y Pedro Juan Gutiérrez en El nido de la serpiente (Anagrama).