Israel se mostró ayer receptivo a la propuesta planteada por Egipto y Francia ante el Consejo de Seguridad de la ONU y agradeció los esfuerzos de sus presidentes, Hosni Mubarak y Nicolas Sarkozy, para resolver la situación en Gaza. La secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice, apoyó sin reservas la propuesta de El Cairo y presionó a sus aliados de Jerusalén para que la aceptaran. El plan da satisfacción a las exigencias israelís, pero no contempla la retirada de las fuerzas hebreas de la franja, principal exigencia de Hamás. Además, invita a las partes a mantener una tregua limitada que permita la entrada de ayuda a Gaza y dé tiempo a El Cairo para gestionar una tregua permanente con garantías para todos.

Mark Regev, portavoz del primer ministro israelí, Ehud Olmert, rebajó un poco las espectativas que el proyecto había despertado en la comunidad internacional y, sin hacer concesiones a la retórica, fue muy preciso al valorar la propuesta: "Agradecemos --dijo-- una solución que ponga fin a las actividades terroristas de Gaza sobre territorio israelí y el fin del contrabando de armas entre Egipto y Gaza". Hamás indicó sus reservas a través de su representante en el Líbano, Osama Hamdan.

Fruto de las gestiones diplomáticas de Washington, Israel reconoció anoche que está discutiendo la propuesta egipcia. La secretaria de Estado Rice habló por teléfono con la ministra de Exteriores israelí, Tzipi Livni, y tenía previsto reunirse con ministros árabes y con sus homólogos de Francia y el Reino Unido. "Estamos trabajando para hacerlo lo más rápido que podamos", aseguró la portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino.

Quien se mostró muy esperanzado fue el alto representante de política exterior de la Unión Europea, Javier Solana, que espera que la propuesta egipcia "dé frutos en las próximas horas". El plan en marcha contempla un papel destacado de la UE en las futuras negociaciones y, en ese sentido, una coalición de oenegés reunida en París pidió a la UE que suspenda el proceso de refuerzo de sus lazos con Israel hasta que el estado hebreo acepte "un alto el fuego total".