La UE y EEUU continuaban a última hora de ayer negociando a contrarreloj en Washington la conclusión de un nuevo acuerdo para la transferencia de datos de los pasajeros que vuelan a territorio estadounidense con aerolíneas comunitarias.

"Las negociaciones van bastante bien y las dos partes están comprometidas a respetar el plazo marcado por el Tribunal de Justicia de la UE", aseguró ayer Friso Roscam-Abbing, portavoz del comisario europeo de Justicia, Libertad y Seguridad.

La necesidad de negociar un nuevo acuerdo se debe a una sentencia del Tribunal de Justicia de la UE del pasado mayo. Los jueces europeos dictaminaron entonces que el antiguo acuerdo, negociado tras los atentados del 11-S por las exigencias en materia de seguridad de EEUU, no era válido porque se adoptó sobre una base legal incorrecta, y establecieron la fecha del 30 de septiembre como límite para cerrar otro compromiso

El nuevo pacto permitirá previsiblemente a las autoridades de Washington acceder a 34 elementos de información particular de los viajeros como nombre, dirección, teléfono y correo electrónico, entre otros. En caso de que no haya acuerdo, se aplicarán los regímenes de protección de datos existentes en cada uno de los países de la UE, lo que complicaría mucho la situación.