John Fauntenberry, condenado en Estados Unidos por el asesinato en 1991 de un hombre que le ayudó al recogerle en una carretera, fue ejecutado hoy en Ohio, informaron las autoridades penitenciarias.

Fauntenberry, de 45 años, murió 35 minutos después de recibir una inyección letal en la Instalación Correccional del sur de Ohio en Lucasville. Ohio es uno de los 35 estados de EEUU donde todavía se aplica la pena de muerte.

Hasta mediados de junio, en Estados Unidos fueron ejecutadas 1.168 personas desde que ese castigo fue restablecido por el Tribunal Supremo en 1976, según datos del Centro de Información sobre la Pena de Muerte (CIPM).

Según la portavoz de la prisión, Andrea Carson, Fauntenberry pasó sus últimas horas mirando la televisión y reunido con un sacerdote, mientras los abogados agotaban sus últimas apelaciones ante el Tribunal Supremo de Justicia, que dos horas antes rehusó intervenir.

Fauntenberry se declaró culpable de la muerte de Joseph Daron, de 46 años, con dos cargos de homicidio agravado, robo agravado y hurto. Además, confesó que había matado a otras cinco personas en varias ciudades estadounidenses entre 1990 y 1991. Su abogado alegó para detener la ejecución que el condenado había sufrido daño cerebral en un accidente de infancia y al ser herido en la Marina de Guerra.