El recrudecimiento de la violencia contra las fuerzas ocupantes ha agudizado el temor del Gobierno a que los soldados españoles destacados en Irak sean objeto de atentados. Por eso el general Alfredo Cardona, jefe de la Brigada Plus Ultra, se entrevistó el jueves con los líderes locales de la provincia iraquí de Al Qadisiya, a quienes pidió ayuda para reforzar la seguridad de sus tropas, además de garantizarles que el Ejército español sólo pretende cooperar en la reconstrucción del país.

El Ministerio de Defensa, que administra con gran celo toda la información relativa al contigente español enviado a Irak, difundió ayer el contenido de la videoconferencia que el ministro, Federico Trillo, mantuvo con el general Cardona para conocer detalles sobre las citas que éste celebró por separado con el gobernador de la provincia de Al Qadisiya, Hazim Al Salamis, y con el líder religioso Alí Sayed Mamud.

Según la nota oficial, ambos ofrecieron al general su "total colaboración para garantizar la seguridad del contingente español". "El ambiente de los encuentros fue muy cordial, y en ningún caso se expresó un rechazo a la presencia de los militares españoles, sino todo lo contrario. Ambos expresaron la alegría con la que su pueblo recibe a los españoles", narra de forma entusiasta el parte.

De acuerdo con la versión de Defensa, Cardona, que prevé reunirse en breve con algunos líderes tribales, aseguró a Trillo que la moral de los 490 soldados españoles es "muy alta".