Más vale prevenir que curar. Esta es la máxima que ha hecho suya estos días el Gobierno de EEUU, que ayer ordenó cerrar su embajada en Yemen tras detectar "indicios" de un ataque de Al Qaeda a intereses estadounidense en el país árabe. A la medida se sumó también "por razones de seguridad" la representación diplomática del Reino Unido, mientras que la española ha extremado "las precauciones", aunque "permanece abierta y operativa", según fuentes del Ministerio de Exteriores.

El consejero de Seguridad y Contraterrorismo de la Casa Blanca, John Brennan, aseguró que el Gobierno de su país decidió cerrar la sede diplomática --que ya fue atacada en dos ocasiones en el 2008-- porque el grupo Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA) "planea un ataque contra objetivos en Saná, probablemente nuestra embajada". AQPA se atribuyó el atentado fallido contra el avión de la Northwest el 25 de diciembre.

El pasado jueves, el personal diplomático de EEUU en Saná se puso en contacto con los ciudadanos de su país en Yemen para que mantuviesen "un nivel alto de alerta" y que pusieran "en práctica medidas de seguridad". La semana pasada, AQPA colgó un comunicado en internet en el que reclamaba a los musulmanes ayuda para "matar a cada cruzado que trabaje en embajadas o en otros lugares".

PLAN DE ATAQUE Aunque Londres no habló ayer de haber recibido amenazas directas, fuentes del Gobierno yemení dijeron que una célula de Al Qaeda, desarticulada en diciembre, planeaba un atentado a la sede diplomática. Para el premier Gordon Brown, anfitrión de la conferencia internacional que se celebrará el 28 de este mes en Londres sobre Yemen, el país árabe se ha convertido en "una incubadora y refugio del terrorismo".

Las medidas extraordinarias de protección puestas en marcha ayer se han tomado un día después de que Washington y Londres decidieran aunar esfuerzos para apoyar al Gobierno de Saná en la lucha contra el terrorismo islamista. El acuerdo contempla financiar una fuerza policial de élite contraterrorista y apoyar la labor de los guardacostas yemenís, que intentan evitar la entrada de islamistas.

DUPLICAR LA AYUDA El jefe del Mando Conjunto del Ejército de EEUU, David Petraues, ha dicho que este año EEUU duplicará la ayuda en asistencia de seguridad al país árabe. En el 2009, esta fue de casi 70 millones de dólares. Washington ha desmentido que vaya a enviar tropas a Yemen y tampoco ha admitido haber participado en las ofensivas contra reductos terroristas de AQPA en Yemen los pasados 17 y 24 de diciembre y que se saldaron con la muerte de 60 personas.

Sin embargo, en declaraciones a la CBS, Sebastián Gorka, que la cadena presentó como "un experto americano en operaciones especiales que entrenó a oficiales yemenís", aseguró que estos ataques, "en los que se utilizaron misiles de crucero, fueron llevados a cabo por EEUU". AQPA dijo que el nigeriano Umar Faruk Abdul Mutalab actuó como represalia a los ataques aéreos del mes de diciembre.

Este fin de semana, el Ejército yemení ha reanudado su ofensiva con más refuerzos en las provincias con presencia de AQPA, como Marib y Jowf, al este del país, unas zonas montañosas en las que se cree estuvo Abdul Mutalab durante los cinco meses que pasó en Yemen.

Por otra parte, el consejero de contraterrorismo de la Casa Blanca, John Brennan, aseguró que el imán Anuar al-Aulaqi, un predicador nacido en EEUU y que actualmente reside en Yemen, "estuvo en contacto directo con Abdul Mutalab". Al-Aulaqi "nos da problemas", dijo Brennan, "ya que intenta fomentar actos terroristas".