Laura González Perogil, la onubense detenida el pasado 14 de julio en Londres, recibió ayer por primera vez la visita de dos de sus hermanos en la prisión de mujeres de Holloway Road. González se encuentra bien de ánimo y "desesperada por salir", pero no podrá hacerlo antes de que se celebre el juicio, como pronto a final de año: su familia carece de los recursos suficientes para pagar las 100.000 libras (150.000 euros) que la justicia ha establecido como fianza para dejarla en libertad condicional.

La española, de 27 años, fue arrestada después de que Scotland Yard detuviera a su marido, Redha Terki, ciudadano británico de origen turco, y a la sueca Tina Lund, en el aeropuerto de Stansted. La detención de la española se produjo después en su domicilio de la capital británica, donde la policía halló una bolsa llena de pasaportes falsos. Ella le dijo a sus hermanos que no sabía nada. Nunca había visto la bolsa ni conocía a la sueca.

Antes de ser detenida, trabajaba de camarera en un hotel. Su marido no tenía trabajo, así que ella se encargaba de pagar las facturas. Según relataron ayer sus hermanos, a veces le preguntaba a su marido qué hacía, pero siempre recibía la misma respuesta: "No preguntes tanto".