El Estado Islámico ha asesinado al menos a 116 personas, en la localidad de Al Qariatain, al este de Siria. Los yihadistas se hicieron con la región, en la provincia de Homs, el pasado 1 de octubre, cuando iniciaron los ataques.

Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, el EI acusó a la mayor parte de las víctimas de informar y colaborar con las autoridades sirias. Desde el pasado viernes, el Ejército sirio ha recuperado el control de Al Qariain, después de que el grupo terrorista se retirara la noche anterior.

Un total de 83 de las víctimas fueron asesinadas durante los dos últimos días en los que los yihadistas controlaron la ciudad. Unos 200 combatientes del EI se replegaron en dirección al desierto. La mayoría de los radicales que tomaron Al Qariain eran originarios de la población y pertenecían a células durmientes de la organización.