El Parlamento Europeo renunció ayer a multar a los diputados ausentes en el primer debate con José Manuel Durao Barroso sobre el estado de la UE, como estaba previsto inicialmente para asegurarse una nutrida presencia en el hemiciclo.

Varios eurodiputados amenazaron con boicotear el debate si se introducía tal medida, porque iba a dar la impresión de que solo escuchaban a Barroso para no perder dinero. La iniciativa fue propuesta por los líderes de los grupos ante el elevado absentismo parlamentario.