La victoria, piensa Evo Morales, otorga derechos a granel. Y por eso el presidente de Bolivia reelecto con el 63% de los votos anunció ayer que, con el control por parte del Movimiento al Socialismo (MAS) de las dos cámaras del Congreso y el aparato estatal, la "revolución democrática y cultural" tendrá una velocidad vertiginosa. "La obtención de más de dos tercios (en la Asamblea Legislativa Plurinacional) nos obliga, me obliga, a acelerar el proceso de cambios", dijo, en su primer discurso poselectoral.

Morales dijo que su segundo mandato debería contarse como un primer periodo de Gobierno desde la entrada en vigor de la Carta Magna. Sin embargo, negó tener la intención de volver a presentarse en el 2013. "Yo nunca he pensado en la reelección. No tengo ningún interés en una nueva ratificación", señaló.