La invasión de Irak, organizada por EEUU, le ha costado ya la vida a cerca de 25.000 civiles iraquís. Más de un tercio de esas muertes son directamente atribuibles a la violencia de las fuerzas militares de la coalición, en incidentes ocurridos entre el 20 de marzo del 2003 y el 20 de marzo de este año. Lejos de mejorar la situación, en el segundo año de la guerra murieron casi el doble de civiles que en el primero.

Los datos, hechos públicos ayer en el Reino Unido, han sido elaborados a partir de 10.000 informaciones de prensa y recopilados en un estudio del Iraq Body Count y del Oxford Research Group. Estas organizaciones responsabilizan a la coalición del 37% de las muertes de civiles y a insurgentes del 9,5% de ellas. Otro 36% de muertes violentas son de delincuencia común. Entre las víctimas mortales hay un 22,7% de menores de edad y 200 de los fallecidos eran niños de menos de dos años.

El informe coincidió con la publicación de un sondeo en The Guardian , según el cual, la mayoría de los británicos creen que el atentado de Londres está vinculado con la participación británica en Irak. Dos tercios de los 1.005 adultos consultados una semana después del ataque ven clara esa conexión y el 75% está convencido de que habrá otro atentado en el Reino Unido. El Gobierno británico recibió un informe confidencial que indicaba que "los acontecimientos de Irak continúan actuando como motivo y foco de un abanico de actividades relacionadas con el terrorismo en el Reino Unido".

Ese mismo informe del Centro de Análisis del Terrorismo del Reino Unido, filtrado ayer por The New York Times , afirmaba, erróneamente, que no había grupos extremistas "con intención o capacidad" para llevar a cabo un atentado en suelo británico.

EXCUSAS El primer ministro, Tony Blair, volvió a rechazar ayer cualquier responsabilidad. "Por supuesto que los terroristas van a utilizar Irak como excusa. Van a utilizar Afganistán. El 11-S, sin embargo, ocurrió antes, pero entonces la excusa fue la política americana en Israel". Blair hizo esta declaración tras ver al presidente afgano, Hamid Karzai. Blair se ha comprometido a enviar más tropas al país.

Mientras, la violencia que sacude Irak costó ayer la vida de 31 personas, entre ellas tres sunís encargados de redactar la nueva Constitución, cuyo coche fue ametrallado en Bagdad.