No habrá conflicto diplomático entre Japón y Chile como se vaticinaba si salía elegido Alberto Fujimori, en arresto domiciliario en Santiago. La candidatura de Fujimori se anunció justo después de que la fiscal del Tribunal Supremo chileno recomendara su extradición a Perú para responder a los casos de violaciones de derechos humanos y delitos de corrupción. Un juez rechazó posteriormente la petición.

Fujimori se autodenominó El último samurái y prometió "luchar hasta la muerte" por su país y solucionar el contencioso de Japón con Corea del Norte por los secuestros japoneses en el siglo XX.