La décimosegunda cumbre del G20, desde el estallido de la crisis financieras, ha concluido este sábado en Hamburgo (Alemania) con dos graves heridas en su historial, fruto de la interferencia en su historial que ha supuesto la irrupción en escena de Donald Trump, como presidente de EEUU. En su comunicado final, el G20 certifica el abandono de EEUU del Acuerdo de París contra el cambio climático y, aunque promueve "la lucha contra el proteccionismo" en el comercio internacional, abre una rendija a la imposición de barreras en el comercio internacional "en legítima defensa".

"Donde no hay consenso hay que plasmar el disenso" ha admitido la cancillera alemana Ángela Merkel en su calidad de anfitriona de la cumbre de Hamburgo. "Desafortunadamente no hemos llegado a un consenso, pero no se trata de camuflar el disenso, sino que se le menciona claramente", ha remachado Merkel en alusión al imposible acuerdo sobre el clima. En relación al comercio, Merkel ha preferido poner el acento en el compromiso conjunto contra el proteccionismo pasando por alto el apoyo a la utilización de barreras en legítima defensa.

Pero para lograrlo la firma unánime, ha habido que hacer dos importantes concesiones.

DISENSO EN EL CLIMA

La primera de ellas es el reconocimiento explícito de que uno de los 20 miembros está en contra de lo que buscan los otros 19, en el caso de la lucha contra el cambio climático. En un párrafo el comunicado toma nota de la decisión de EEUU de abandonar el Acuerdo de París . En el párrafo anterior, sin embargo, se subraya el compromiso de todos los demás con el citado acuerdo y se subraya su carácter “irreversible”, según ha explicado la cancillera Merkel

En un encuentro con el presidente francés Emmanuel Macron, el presidente de China, Xi Jinping, ha garantizado que su país va a cumplir por completo sus obligaciones bajo el Acuerdo de París, según un comunicado del ministerio chino de Exteriores citado por Reuters. China fue el último país, junto a EEUU, en asumir el acuerdo de lucha contra la emisión de gases en el 2016. .

LEGÍTIMA DEFENSA

La segunda concesión del comunicado es que la tradicional defensa del libre comercio que hacen los líderes capitalistas y los de China yRusia ha tenido que asumir una grave grieta al reconocer a los países la utilización de “instrumentos de legítima defensa comercial”.

“Hemos enviado un claro mensaje al mundo en el sentido de que no vamos a permitir que otras naciones tomen ventaja sobre nosotros por más tiempo”, proclama Donald Trump en su mensaje semanal a los americanos, difundido a través de Youtube, tras ratificar la salida de EEUU del Acuerdo del Clima, el abandono del acuerdo comercial del Pacífico y la decisión de renegociar el acuerdo NAFTA(con México y Canadá) que podría empezar en agosto, según lo hablado en este G20 entre el propio Trump y el mexicano Enrique Peña Nieto.

COMERCIO JUSTO

En materia de comercio, el difícil equilibrio entre los EEUU de Donald Trump y el resto de los países se ha logrado a partir de un párrafo en el que se incluye la tradicional mención del G20 de condena explícita a “la lucha contra el proteccionismo, incluidas todas las prácticas injustas”, y se expresa el apoyo a un comercio internacional libre y justo. La cancillera Merkel se ha mostrado satisfecha por la inclusión de estos aspectos en el comunicado, si bien ha reconocido que "las ventajas del comercio internacional" no ha llegado a todas las personas. "No hemos logrado el crecimiento inclusivo", ha admitido.

No obstante, el texto hace una concesión a los planteamientos de Trump al reconocer a los países la utilización de “instrumentos legítimos de defensa comercial”.

Es la primera vez en la historia del G20 que se incluye una mención a este tipo de escudos defensivos de la política comercial en el que, según se interprete, podrían tener cabida desde unos aranceles contra la importación de acero europeo (como ha amenazado Trump) hasta otros recargos contra la entrada de productos subvencionados (como hace la Unión Europea frente a China). En realidad, en la mención a los “instrumentos legítimos de defensa comercial” no solo cabe el lema “America primero” de Estados Unidos; otros países también se encuentran cómodos con bendición de las barreras comerciales defensivas, empezando porChina y terminando con el propio presidente de Francia,Emmanuel Macron, que ha acuñado su propio lema en la frase “la Europa que protege”.