Jaroslaw Kaczynski presentó ayer su candidatura a jefe del Estado de Polonia en las elecciones del 20 de junio para intentar "completar la misión" de su hermano gemelo, Lech Kaczynski, el presidente polaco fallecido en un accidente el pasado 10 de abril mientras estaba al frente del país.

El hermano del malogrado presidente, que había mantenido la incógnita hasta ahora, se convierte así en la esperanza de los conservadores del partido Ley y Justicia para seguir en la jefatura del Estado. Jaroslaw, sorprendiendo a aquellos que pensaban que estaría abatido por la tragedia, afirmó ayer haber encontrado en su devoción a Polonia la razón para "sobreponerse al dolor personal".

"La trágicamente interrumpida vida del presidente y la muerte de la élite patriótica de Polonia solo tienen un significado para nosotros: debemos finalizar su misión", reza un comunicado de Ley y Justicia, firmado por el candidato conservador.

Sin embargo, quien parte como favorito en los sondeos es el liberal Bronislaw Komorowski, candidato de la Plataforma Cívica del primer ministro, Donald Tusk.