El estado de excepción en Georgia fue levantado hoy a las 19:00 hora local (15:00 GMT), de acuerdo con el decreto del presidente Mijaíl Saakashvili, que lo impuso el pasado día 7 para frenar las protestas opositoras en Tiflis. "Las restricciones de las actividades políticas tenían un carácter provisional, por lo que tras el levantamiento del estado de excepción esas limitaciones quedan suspendidas", reza el decreto presidencial de levantamiento de esa medida extraordinaria.

Saakashvili, sometido a una gran presión internacional desde que decretó el estado de excepción, señala en su decreto que "el país comienza ahora los preparativos de cara a los comicios presidenciales anticipados del 5 de enero próximo". Según ha podido comprobar Efe, en las calles de la capital georgiana, Tiflis, la vida transcurre con aparente normalidad, lejos de la tensión que asoló la ciudad a principios de noviembre cuando comenzaron las protestas.

El estado de excepción fue impuesto después de que los manifestantes opositores fueron dispersados violentamente de las calles de Tiflis y que las fuerzas especiales asaltaran los estudios de la televisión independiente "Imedi". La presencia de las tropas en las calles únicamente se prolongó por espacio de 24 horas y las clases se reanudaron el lunes pasado, aunque durante estos nueve días la televisión pública fue la única autorizada a difundir información. Además, se limitaron los derechos fundamentales de expresión, reunión, manifestación y huelga.

El Parlamento de Georgia ratificó la víspera el decreto presidencial de levantamiento del estado de excepción en ausencia de la oposición, cuyas protestas masivas de principios de noviembre en Tiflis desencadenaron la actual crisis. Pese a todo, el líder del Partido Popular, Koba Davitashvili, una de las diez formaciones opositoras que integran el Consejo Nacional opositor, aseguró hoy a Efe que los mítines y las protestas "se reanudarán". "Tenemos que obligar a las autoridades a que atiendan a nuestras demandas", dijo.

El candidato presidencial del Consejo Nacional, el diputado Leván Gachechiladze, aseguró que la principal demanda de la oposición es el restablecimiento de las emisiones de "Imedi", a la que anteayer un tribunal le revocó la licencia por "incitar a golpe de Estado". Esa decisión ha soliviantado a la oposición georgiana, que tenía en ese canal, propiedad del magnate Rupert Murdoch, a la principal tribuna desde la que podía criticar abiertamente al gobierno de Saakashvili. Según los expertos, la imposición del estado de excepción y la represión violenta de los partidarios de la oposición podría haber costado a Georgia el pronto ingreso en la OTAN, proceso que podría retrasarse ahora durante varios años.