El acosado gobernador del estado de Guerrero (México), Ángel Aguirre, ha anunciado esta madrugada que dimite para "favorecer un clima político que ponga la atención en la solución del 'caso Iguala'", relativo a la desaparición, hace casi un mes de 43 estudiantes de esta localidad que fueron secuestrados por policías municipales y sicarios.

Aguirre es la primera víctima política del escándalo de la desaparición de los jóvenes. Además, mientras otros políticos se mantienene firmes en sus cargos pese a los escándalos relacionados con la violencia en el país, Aguirre es el primer gobernador que presenta su dimisión en casi 40 años. La anterior dimisión fue en 1975 y el protagonista fue también el entonces gobernador de Guerrero.

"Con fundamento en el artículo 84 de nuestra Constitución, he decidido solicitar licencia al honorable Congreso del estado", ha dicho Ángel Aguirre. El presidente del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Carlos Navarrete, ha afirmado poco después que ha sido ese partido el que "le ha pedido al gobernador el abandono de su cargo".

DEMANDA DE LAS FAMILIAS

Su salida del poder era una de las principales demandas de los familiares de los 43 alumnos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa que desaparecieron el 26 de septiembre en Iguala y de sus compañeros, que han protagonizado numerosas protestas para exigir el regreso a casa de los jóvenes.

En los últimos días las movilizaciones, en las que también participan miles de maestros, se han radicalizado con ataques a las oficinas del Gobierno estatal, del Congreso, de las instalaciones del PRD y de las alcaldías de Chilpancingo e Iguala.

Tránsfuga del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Aguirre se convirtió en gobernador en abril del 2011 con el apoyo del PRD y de otros dos partidos menores también de izquierda, Movimiento Ciudadano y Partido del Trabajo. Su mandato terminaba exactamente dentro de un año, el 26 de octubre del 2015.