El Tíbet será reabierto al turismo extranjero el mes que viene, tras una prohibición de seis semanas que golpea a la industria turística, clave en esta empobrecida zona montañosa. El Gobierno de la región autónoma volverá a dar permisos de entrada a extranjeros el 1 de mayo por primera vez desde el 16 de marzo, dos días después de los primeros disturbios en Lasa. Entretanto, Pekín se propone reforzar "la educación patriótica" de los monjes.