La pérdida "del margen de maniobra" conseguido por España frente a Estados Unidos durante los primeros años de la transición fue denunciada ayer por Felipe González. En la clausura de la 11 reunión del Círculo de Montevideo, celebrada en Barcelona, el expresidente del Gobierno consideró que esta reducción de la autonomía española es una de las "víctimas" que ya se ha cobrado el conflicto con Irak.

Entre ellas, señaló el "daño" inflingido a la cohesión de Europa. González opinó que la brecha será "difícil de recomponer" y tendrá "consecuencias por mucho tiempo". Pese a ello, consideró que la fractura no se ha producido en la conciencia de los ciudadanos europeos, donde afirmó que la división "es menor" que entre los responsables políticos.

PRIMERAS VICTIMAS

El expresidente citó también como víctimas de la crisis prebélica a la "relación de confianza" entre Europa y el Mediterráneo, y la ralentización de las relaciones de la UE con Iberoamérica. Coincidiendo con la visita de José María Aznar al rancho privado del presidente de EEUU, George Bush, González atribuyó esta situación al "nuevo macartismo interno y externo" que imprime la administración norteamericana.

A juicio de González, EEUU ha logrado hacer de la defensa de la seguridad una "religión" y colocar en una posición "difícil" a los países que no comparten sus tesis.