La policía británica archivó secretamente los detalles del ADN de 24.000 menores de entre 10 y 18 años. Ninguno de los fichados fue amonestado, procesado o condenado por ofensa alguna. El Ministerio de Interior defendió ayer el hasta ahora desconocido banco de datos electrónico.

La existencia de los archivos genéticos fue descubierta por el diputado de la oposición conservadora Grant Shapps, al interesarse por el hijo de uno de sus votantes, un chico de 14 años de edad que había sido detenido por error y cuyo perfil genético quedó archivado.

La legislación permite tomar las muestras de ADN de cualquier sospechoso detenido en el Reino Unido, aunque éste resulte después inocente y quede libre sin cargos. El archivo no es pues ilegal, pero Shapps consideró que se ha creado "a hurtadillas" y pidió su eliminación.