La policía halló ayer una bomba rudimentaria a dos kilómetros de distancia de Villa Certosa , la residencia veraniega de Silvio Berlusconi en Porto Rotondo (Cerdeña), horas después de la breve estancia del premier británico, Tony Blair, en la mansión del primer ministro italiano.

Una llamada al diario local Unión Sarda informó sobre la ubicación exacta del artefacto, aunque la persona que llamó dijo que habían colocado dos bombas y no una. "La segunda la buscáis por vuestra cuenta", dijo el interlocutor, que atribuyó el atentado a los Grupos Proletarios para el Comunismo.

Según el diario Corriere della Sera, "las bombas habrían sido colocadas para protestar contra la no publicación de un documento que este grupo" había enviado el 30 de julio a la redacción de Unión Sarda en el que anunciaba un "verano caliente".