Los votos de millares de haitianos acabaron en la basura. La noche del martes, una televisión exhibió las imágenes de urnas y papeletas en un vertedero; diversos testigos denunciaron que fueron arrojadas allí el día 7, cuando Haití elegía presidente y Parlamento. Las autoridades electorales admitieron ayer que "este asunto puede desacreditar las elecciones", mientras la comunidad internacional buscaba cómo proclamar a René Préval vencedor en esa primera vuelta.

Uno de los funcionarios de la Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (Minustah), encargada del aspecto logístico de los comicios, reconoció que "igual desaparecieron 35.000 votos". El portavoz de la Minustah, David Wimhurst, admitió que "se pudieron extraviar muchas urnas", al menos en nueve centros de votación, sumidos en disturbios violentos.