El informe de la comisión estadounidense que investiga los atentados del 11 de septiembre del 2001 ofrecerá nuevas pruebas que sugieren que hubo cooperación entre Irán y la red terrorista Al Qaida, según publica The New York Times.Informaciones de los servicios secretos estadounidenses sugieren que el Gobierno de Teherán facilitó a varios de los terroristas suicidas del 11-S el transito por Irán cuando se dirigían a los campos de entrenamiento de Al Qaida en Afganistán, según el periódico que cita como fuentes funcionarios estadounidenses.Las últimas ediciones electrónicas de las revistas Time y Newsweek revelan también las evidencias sobre los vínculos entre Irán y Al Qaida que serán incluidas en el informe de la comisión investigadora.El informe dejará constancia de que entre el 2000 y principios el 2001 varios de los terroristas que participaron en los atentados del 11-S pudieron transitar por Irán después de que las autoridades de Teherán ordenaran a los guardias fronterizos que dejaran entrar en el país a los miembros de Al Qaida de origen saudí sin sellar sus pasaportes, según los medios estadounidenses.Esto permitió además que los terroristas del 11-S entraran en EEUU sin levantar sospechas. Estados Unidos no tiene relaciones diplomáticas con Irán, país al que el presidente George W. Bush incluyó en el llamado Eje del mal, junto a Irak y Corea del Norte.El informe se presentará el juevesLa comisión investigadora de los atentados del 11-S, compuesta por 10 prominentes miembros de los partidos Republicano y Demócrata estadounidenses, presentará su informe el próximo jueves.El informe no sugiere, sin embargo, que Irán conocía el complot para los atentados del 11 de septiembre en EEUU y que causaron más de 3.000 muertos.Un borrador provisional del trabajo de dicha comisión indicó el pasado mes que no había evidencias de que hubo una relación de colaboración entre Al Qaida y el régimen del depuesto presidente de Irak Sadam Husein.Funcionarios estadounidenses han informado a The New York Times que la comisión investigadora planea incluir en su informe una copia de un estudio elaborado por la CIA en 1998 y dirigido al entonces presidente Bill Clinton, en el que advertía sobre posibles complots sobre secuestros de aviones por la red terrorista, según The New York Times.