México sigue en vilo, a la espera de saber quién ganó las elecciones presidenciales del domingo. Aunque el conservador Felipe Calderón logró en el recuento preliminar una leve ventaja sobre el izquierdista Andrés Manuel López Obrador (AMLO), la autoridad electoral se vio incapaz de determinar quién de ellos ganó, y pidió esperar al cómputo oficial del miércoles. Ambos candidatos se proclamaron ganadores, y el pulso continúa.

La noche del domingo presentó el menos deseable de los escenarios. Ni las encuestas de salida ni el conteo rápido dieron un vencedor, y fue el derrotado Partido Revolucionario Institucional el que se presentó como legitimador de la elección y "factor de estabilidad", descalificó los "experimentos estadísticos" y pidió "contar acta por acta". Rebasado, el presidente del Instituto Federal Electoral, Luis Ugalde, pidió paciencia "hasta concluir los cómputos oficiales, que se inician el miércoles".