La excandidata a la vicepresidencia de Colombia Clara Rojas, liberada el jueves por las FARC junto con la excongresista Consuelo González, reveló ayer que intentó escapar de su cautiverio con su compañera y amiga Ingrid Betancourt. El intento, que no tuvo éxito, provocó que las separaran.

Rojas expresó su preocupación por la excandidata presidencial tras ver sus imágenes. "Me preocupó enormemente que la tuvieran encadenada", dijo. Y añadió: "Me preocupa su estado de salud, porque sé que comía poco, y por su pesimismo crónico".

Al ser preguntada sobre la propuesta del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, de no considerar a las FARC como grupo terrorista, Rojas afirmó que "mantener a personas secuestradas" es "un delito de lesa humanidad". Tanto ella como González apuntaron el acuerdo humanitario como la única fórmula válida para poder zanjar el conflicto.