En una nueva y extraña comparecencia ante los medios de comunicación iranís, Sakineh Mohamadi Ashtiani, la mujer condenada a muerte por cometer adulterio y participar en el asesinato de su marido, reveló que demandará a los dos periodistas alemanes que entrevistaron a su hijo, Sajjad Ghaderzadeh, tras ser sentenciada a la pena capital. Por este motivo, los reporteros están desde el pasado mes de octubre en la cárcel en Irán acusados de espionaje.

"Tengo una queja sobre los dos alemanes que me han avergonzado. ¿Para qué han venido aquí? ¿Por qué han venido y han actuado como periodistas?", afirmó Ashtiani el sábado, según la cadena oficial iraní Press TV. Según Teherán, los dos informadores del semanario Bild entraron al país con visado de turistas.

Ashtiani dijo además que no ha sido torturada en la cárcel y que todas las entrevistas que ha hecho han sido por "voluntad propia". El Gobierno de Berlín considera poco fiables estas declaraciones. "Lamentablemente no es raro que la gente en Irán sea forzada a hacer declaraciones", dijo una fuente diplomática.

Ashtiani habló a la prensa después de su hijo. "En mi opinión, mi madre es culpable, pero hemos perdido a nuestro padre y no queremos perder también a nuestra madre. Por lo tanto pedimos que se le conmute la pena", dijo Ghaderzadeh. Tras sus declaraciones, se permitió a Ashtiani salir de prisión para cenar con su hijo y su hermana y hablar con la prensa.