La Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) de la OTAN acusó hoy en un comunicado a los talibanes de matar a trece civiles y herir a otros cuatro en ataques en las últimas 24 horas en Afganistán. El ataque más grave ocurrió ayer en el distrito de Ab Band de la provincia central de Ghazni, donde seis civiles murieron tiroteados por insurgentes mientras trabajaban en la construcción y reparación de carreteras, según oficiales afganos citados por la ISAF.

En otro suceso ocurrido ayer en la misma provincia, tres civiles murieron y uno fue herido cuando el vehículo en el que viajaban fue alcanzado por una mina. En el distrito de Kandahar, de la provincia sureña homónima, otros tres civiles murieron y otros dos resultaron heridos en la explosión de un artefacto explosivo casero colocado a un lado de una carretera. Y en otra explosión de una bomba, un civil pereció y otro sufrió heridas en el distrito de Chamkani, de la provincia oriental de Paktya.

"(Los insurgentes) están conchabados con el mulá Omar y los talibanes han dicho en público recientemente que ataquen civiles, mujeres y niños", denunció en la nota el comandante general de la región este de la ISAF este John F. Campbell. Las minas y las bombas de fabricación casera son uno de los métodos favoritos de los insurgentes talibanes para hostigar a las tropas internacionales desplegadas en Afganistán, aunque a menudo suelen causar bajas entre la población civil. 1.074 civiles murieron en el primer semestre del año víctimas de la guerra afgana, un aumento del 1,3 por ciento respecto al mismo período del año anterior, según datos de la organización independiente Afghanistan Rights Monitor (ARM).