Israel quiso anticiparse ayer a la reunión en la Casa Blanca entre el presidente, Barack Obama, y su homólogo palestino, Mahmud Abbás, para abordar posibles soluciones al embargo de Gaza. Su Gobierno anunció que aliviará el bloqueo de la franja levantando las restricciones a algunos productos. ¿Materias primas? ¿Cemento? No, aperitivos. Israel permitirá la entrada de patatas fritas, hummus, galletas, refrescos y zumos. "Van a enviar los entrantes, ahora nos falta el primer plato", manifestó con ironía el ministro de Economía palestino Hasán Abú Libdeh desde Ramala.

La reunión en Washington llegó 10 días después de que el asalto israelí a la flotilla humanitaria de Gaza reabriera el debate sobre el bloqueo. En la rueda de prensa conjunta con Abbás, Obama repitió que el embargo es "insostenible" e instó a Israel a "trabajar con todas las partes implicadas" para buscar una alternativa. "Debería haber otras formas para impedir el flujo de las armas que ponen en peligro a Israel", aseguró. Egipto ya ha anunciado que mantendrá abierta su frontera con la franja de forma indefinida, mientras Turquía propuso ayer la participación de la OTAN para supervisar los barcos con destino a Gaza.

El presidente estadounidense no aportó recetas concretas. Sí llamó a crear un "nuevo marco conceptual" que permita "mejorar" la vida de la población de Gaza para que sus habitantes puedan "llevar a cabo sus sueños y aspiraciones". Su país, dijo, está negociando con Israel para propiciar un cambio en las reglas del juego. Hasta entonces, quiso reafirmar su compromiso con los palestinos ofreciendo al Gobierno de Abbás 400 millones de dólares.

GESTO IRRELEVANTE De momento, el gesto anunciado ayer por Israel se antoja irrelevante. En Gaza ya hay fábricas de snacks y de bebidas carbonatadas. Algunas, como la de Coca-Cola, siguen funcionando con las materias primas que importa a través de los túneles egipcios. Lo que Gaza necesita son fronteras abiertas para resucitar la economía y crear empleo, teniendo en cuenta que el 80% de la población vive con menos de dos dólares al día. "No necesitamos refrescos, necesitamos materias primas para la industria y materiales para reconstruir Gaza", dijo ayer el ministro de Finanzas de Hamás, Ziad el Zaza.

Por otra parte, Israel espera la luz verde de EEUU para anunciar la creación de una comisión de investigación sobre el asalto a la Flota de la Libertad el pasado 31 de mayo. Israel parece aceptar la presencia de dos observadores internacionales, uno de los cuales es estadounidense.