La Fuerza Aérea israelí continuó esta madrugada su bombardeo masivo de la franja de Gaza con ataques que mataron a siete personas, casi todos menores o mujeres, y destruyeron la Universidad Islámica, próxima a Hamás, según fuentes médicas y testigos. Un hombre, dos mujeres y un bebé de un año de edad murieron en un ataque a un edificio del campo de refugiados de Yabalia, en el norte de la franja, indicaron fuentes médicas palestinas. Además, dos adolescentes y un niño de la misma familia perdieron la vida cuando la aviación militar israelí lanzó su carga explosiva en la ciudad de Rafah, en el sur de Gaza, agregaron las fuentes.

Los últimos bombardeos elevan a más de trescientos muertos y mil heridos el recuento provisional de 48 horas de ataques aéreos israelíes contra centros vinculados a Hamás, según fuentes médicas. La oficina del jefe de Gobierno del movimiento islamista en Gaza, Ismail Haniye, también fue bombardeada esta madrugada, informó el Ejército israelí en un comunicado que da cuenta en las últimas doce horas de ataques contra "docenas de objetivos vinculados a Hamás, como centros de almacenamiento y manufacturación de armas, túneles, lugares de lanzamiento de cohetes y almacenes".

Haniye no se encontraba en la oficina, pues todos los líderes de Hamás han pasado a la clandestinidad desde que comenzó la oleada de ataques. Poco después de la medianoche, los F-16 bombardearon la Universidad Islámica, situada al oeste de la ciudad de Gaza y próxima a Hamás, a diferencia de la cercana Universidad Al-Azhar, vinculada a Al-Fatah.

Los residentes en el barrio de Remal de la capital de la franja oyeron cuatro grandes explosiones que causaron el pánico en la zona y vieron grandes columnas de humo blancas y negras salir del edificio. Varios edificios del campus femenino con laboratorios químicos quedaron destruidos, mientras que inmuebles colindantes resultaron seriamente dañados, precisaron.

La versión israelí

El Ejército israelí defiende que se trataba de un "centro de desarrollo e investigación de armas empleado, entre otros usos, como laboratorio para desarrollar y manufacturar explosivos y parte inseparable de la infraestructura de manufacturación de cohetes Kasam". Las milicias palestinas, por su parte, han seguido lanzando cohetes contra el sur de Israel, uno de los cuales ha matado a un israelí y herido a otros siete en la ciudad de Ashkelón, informa la radio pública del país.

Además, un obrero palestino ha herido a cuatro israelíes -uno de ellos de gravedad- al apuñalarles en el asentamiento de Kiryat Sefer, en territorio cisjordano, informó la Policía. El atacante resultó gravemente herido de bala en el primer aparente acto de venganza fuera de Gaza a la operación israelí en la franja. Según datos del Ejército israelí, más de 150 proyectiles han sido disparados contra las localidades cercanas a la franja, uno de los cuales mató el sábado a un hombre de la localidad de Netivot. Dos israelíes han muerto hasta el momento desde el comienzo de la ofensiva.