El Gabinete de Asuntos Políticos y de Seguridad de Israel ha declarado hoy oficialmente al Movimiento Islámico Hamás "organización terrorista que tomó el control en la franja de Gaza y la transformó en un territorio enemigo". La decisión fue anunciada por la radio publica israelí, que cita fuentes del Gobierno las cuales precisaron que la nueva situación hace prever la imposición de medidas de castigo y restricciones a ese territorio palestino, en el que viven un millón y medio de personas.

Las restricciones podrían afectar a los servicios de electricidad, combustibles y otros suministros y mercancías que Israel vende a Gaza, de acuerdo con la emisora. También se restringirá el tránsito de personas entre Gaza e Israel y las transferencias de dinero con destino a ese territorio, y desde allí al exterior. Los parientes de prisioneros palestinos de Gaza recluidos en prisiones de Israel no podrán entrar a este país para visitarlos, y se impedirá el ingreso de ciudadanos árabes al Estado judío.

El ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, fue quien propuso al Gabinete declarar a Gaza "territorio enemigo" para justificar la aplicación de los eventuales castigos, según la fuente. La radio adelantó que Israel descarta, sin embargo, una operación militar a gran escala en Gaza debido a la tensión con Siria en la frontera norte de este país.

El debate sobre la imposición de restricciones en los servicios básicos a Gaza comenzó la semana pasada en el Gabinete israelí a raíz de los ataques de milicianos que desde la franja lanzan cohetes Al Kasam contra la población civil del sur de Israel.

Hamás, que controla Gaza desde que sus milicias derrotaran en junio en la franja a las fuerzas de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), ofreció hace dos días un alto el fuego a condición de que el Ejército israelí deje de operar contra sus milicianos, lo que en muchas ocasiones causa víctimas entre los civiles, pero el Gobierno de Israel pasó por alto la propuesta. Taher al Nounou, portavoz de Ismail Haniye -líder de Hamás y jefe del ejecutivo que gobierna ahora en Gaza-, reaccionó a la decisión del Gabinete de Seguridad diciendo que "no es nada nuevo", en alusión a que las autoridades israelíes -que no son las única proveedoras- han cortado el suministro de electricidad en ocasiones anteriores.

Por su lado, Haniye exhortó hoy a milicianos de la Yihad Islámica, que suelen atribuirse la mayoría de los ataques con cohetes Al Kasam contra Israel, a seguir una política de contención precisamente para evitar las represalias de Israel, informaron sus allegados en la ciudad de Gaza.