Ados días de la fiesta de la Virgen de Polsi, cuando los calabreses se reúnen sin distinción entre buenos y malos, las autoridades italianas realizaron ayer la primera redada contra la ´Ndrangheta, la Mafia local, después de la masacre del 15 de agosto en Duisburgo (Alemania), en la que seis jóvenes de Calabria fueron acribillados. Es la primera vez que se emprende una operación de tal envergadura contra clanes enfrentados de la Mafia calabresa. El dispositivo coincidió con la llegada a Reggio Calabria, la capital de la región, de Jorg Ziercke, jefe de la policía criminal de Alemania.

Al final del día, el ministro del Interior, Giuliano Amato, presentó un saldo de 32 detenidos, tres de ellos hallados escondidos en un refugio de cemento armado, aunque ninguno relacionado con la venganza de Ferragosto en Alemania. Un comunicado de Interior puntualizó que la operación era "una respuesta fuerte y necesaria del Estado en San Luca para acabar con la vendetta entre clanes de la ´Ndrangheta que causó tanto terror".

43 ORDENES DE ARRESTO Antes del amanecer, 500 carabineros y policías acordonaron el pueblo de San Luca, a 12 kilómetros de la costa, con 43 órdenes de arresto en las manos. Todos los detenidos están acusados de pertenecer a la Mafia, de asesinato y de tráfico ilegal de armas, con relación a hechos precedentes a la masacre de Duisburgo. Entre ellos figuran cinco mujeres y los hermanos de dos de las víctimas de Alemania, Achille Marmo y Giovanni Strangio.

Según informaciones oficiales, han sido detenidos también los presuntos asesinos de María Strangio, la esposa de Giovanni Nirta, jefe de uno de los clanes calabreses. La mujer fue asesinada durante las pasadas Navidades en San Luca, circunstancia que volvió a disparar un ajuste de cuentas entre dos clanes locales que se arrastra desde el año 1991. La matanza de Duisburgo puede haber servido, según se ha escrito, para vengar aquella afrenta al capo, aunque los investigadores italianos apuntan más hacia un ajuste de cuentas interno por el control de los rentables tráficos de la ´Ndrangheta.

La magistratura de Calabria reveló ayer, sobre la base de informaciones facilitadas por la policía alemana, que en el restaurante donde se produjo la matanza aparecieron indicios de un rito de iniciación. Además, el tipo de armas hallado en el local y conversaciones entre las víctimas interceptadas antes de que viajaran a Alemania llevan a pensar que uno de los clanes estaba por asestar un golpe espectacular a los adversarios.

El propio Ziercke ha puntualizado en Italia que los seis asesinados no acababan de celebrar la mayoría de edad de uno de ellos, como se dijo, sino la iniciación a la ´Ndrangheta del que había cumplido los 18 años. La prueba es una estampita religiosa que fue hallada carbonizada en el bolsillo del muerto. Se trata de una imagen usada para los ritos de ingreso en esta Mafia.

ALIVIO CIUDADANO La operación de ayer en San Luca ha aliviado un poco a sus habitantes, que estaban sorprendidos porque desde el 15 de agosto ningún político nacional o regional había visitado el pueblo. Interior envió más de mil agentes, que operaban en la zona durante las 24 horas del día y que se añadieron a una presencia policial que, en una región de tan solo 160.000 habitantes, supera más de 90 veces la de cualquier barrio de Roma o Milán. Para ilustrar la situación en la que deben trabajar, la magistratura calabresa ha ofrecido el dato de que 33 diputados regionales de un total de 49 están siendo investigados por estafa, asociación de malhechores e intercambio de favores políticos por paquetes de votos ofrecidos por la Mafia. Hasta ayer la única manifestación pública de cercanía a los 4.700 habitantes de San Luca había sido un encuentro de los 50 curas de la diócesis.