El enviado especial estadounidense para Corea del Norte, Stephen Bosworth, destacó hoy en Tokio la necesidad de que Estados Unidos y Japón trabajen juntos para resolver la crisis en la península coreana. Bosworth se reunió hoy con el viceministro japonés de Exteriores, Kenichiro Sasae, y, por separado, con el viceministro portavoz, Tetsuro Fukuyama, durante su última escala en un viaje por Asia que lo llevó previamente a Corea del Sur y China El representante estadounidense manifestó que su reunión con Sasae se centró en "avanzar conjuntamente en nuestros intentos de hacer frente a las cuestiones en la península coreana". Las conversaciones de Bosworth en Japón habrían tratado las condiciones necesarias para reabrir el diálogo a seis bandas sobre la desnuclearización de Pyongyang, en el que participan las dos Coreas, EEUU, China y Rusia, según la agencia local Kyodo. Estas conversaciones están paralizadas desde hace dos años por decisión unilateral del régimen comunista de Corea del Norte, que recientemente ha dado muestras de querer retomarlas, como también pretende China, anfitrión del diálogo. Pekín propuso retomar el diálogo para aliviar la tensión en la península después del ataque de Pyongyang el 23 de noviembre a la isla surcoreana de Yeongpyeong, en la tensa frontera del Mar Amarillo (Mar Occidental), que causó cuatro muertos. En Washington, el ministro japonés de Exteriores, Seiji Maehara, y la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, coincidieron ayer en que Corea del Norte debe cesar sus provocaciones y adoptar "medidas concretas" para su desnuclearización antes de retornar al diálogo multilateral. Las negociaciones a seis bandas fueron creadas en 2003 con el fin de promover la desnuclearización de Corea del Norte a través de incentivos económicos. Seúl, Washington y Tokio creen que, tras el ataque norcoreano del pasado 23 de noviembre, aún no se dan las condiciones para volver a la mesa de negociación. El régimen norcoreano realizó en 2006 y en 2009 sendos ensayos nucleares subterráneos a partir de plutonio que le causaron sanciones y un mayor aislamiento internacional. En 2009, Corea del Norte anunció que estaba en "la última fase" para la obtención de uranio enriquecido, utilizado para fabricar armas nucleares, y en noviembre pasado el científico estadounidense Siegfried Hecker confirmó sus avances en ese programa tras una visita a ese país.