En la cola que quiere acceder a la tumba de Juan Pablo II se comenta que las flores han sido prohibidas. Y en la Taverna Varrone --donde aseguran que iba a cenar Alberto Sordi-- dos periodistas hablan del vaticanista Marco Tosatti. "Al contar con ocho de sus miembros en el Sacro Colegio, los jesuitas, según Tosatti, pueden jugar un papel importante en el cónclave".

Jesús Omeñaca, secretario del muy poderoso Rosalio José Castillo Lara, cardenal venezolano que fue ministro de economía y, a la vez, primer ministro del Gobierno del Vaticano, sonríe cuando uno señala un coche matriculado en el Vaticano (SCV). "Cuando vivíamos en uno de los palacios del Vaticano, los maliciosos no leían en esas letras Stato della Citt del Vaticano sino Se Castillo Vuole, es decir, Si Castillo quiere". Omeñaca es un salesiano sencillo, un soriano honesto que, durante su etapa palaciega, vivió tiempos turbulentos en los que su cardenal decía que, por conocer bien a monseñor Marcinkus, podía asegurar que éste había sido víctima de una estrategia de difamación y linchamiento moral.

De aquellos años, Omeñaca recuerda mucho más gratamente a un agustino, un hermano lego que tenía a su cargo la Capilla Sixtina, y a dos fotógrafos: Arturo Mari, fotógrafo oficial del Vaticano, y Franco Origlia, también fotógrafo habitual del Papa, que trabaja para la agencia Getty. "Son dos grandes personas. Y, además, la mujer de Arturo es venezolana". Una de las fotografías preferidas de Mari fue la que le tomó horas después de ser elegido Papa. En la misma aparece el cardenal Wyszynski --símbolo de la resistencia polaca contra el régimen comunista-- arrodillado ante un Juan Pablo II, pletórico de energía eslava.

El momento más emotivo

De todas las instantáneas que Franco Origlia le ha tomado a Juan Pablo II, el fotógrafo italiano destaca una. "La que más me gusta es una en la que aparece con el expresidente surafricano Nelson Mandela. Y matizaría. No es la mejor foto sino el momento más emotivo que yo he vivido fotografiando al Papa". Recuerda Origlia que estaban en el Vaticano, en una pequeña sala situada junto al estudio del Papa. "Nos saludó, esperó y, tras escuchar unos pasos, apareció Mandela, vestido con una camisa africana. Sonriendo y con los brazos abiertos, le preguntó: ´¿Cómo estás amigo mío?".

Origlia reconoce que, tanto él como su amigo Mira, aún creen que Juan Pablo II no ha muerto. "Arturo aún está más afectado que yo. Trabajar en el Vaticano es un privilegio. Imagine lo que significa poder tomar fotografías en la Capilla Sixtina". Origlia se emociona y habla de los instantes privados. "Era en ellos cuando comprobabas que Juan Pablo II era un hombre fuerte, decidido, pero dotado de un gran sentido del humor". Fue el pasado 13 de enero, en la sala Clementina, la última vez que los dos fotógrafos amigos pudieron estar a solas con Juan Pablo II. "Le pedí a Arturo que me tomara una foto con él. Así lo hizo y recuerdo que el Papa le dijo: ´Supongo que no le cobrarás nada a tu colega por esta gran exclusiva´".

El cardenal Rosalio José Castillo Lara está en Roma aunque, por edad, no pueda participar directamente en el cónclave. Y su fiel secretario, Jesús Omeñaca, recuerda las muchas veces que comieron en el restaurante sardo de Aldo, I quattri mori, (los cuatro moros). "Los cardenales, vistos de cerca, acostumbran a ser bastante buenas personas. No me tome usted muy en serio, pero creo que el cardenal Giovanni Battista Re, a quien conozco muy bien, tendrá mucha más chance de lo que se dice estos días. Ha conseguido, además, pasar bastante desapercibido".

El dilema vaticano

Uno, después de despedirse de Jesús Omeñaca, al pasar frente a la puerta vaticana de Santa Ana, recuerda lo que el colega y amigo milanés Giancarlo Galli escribió en su libro Finanza Bianca. Libro en el que aparece el cardenal Castillo Lara. "¿Será cierto que todos los querubines ayudan a los financieros vaticanos de largas sotanas y laicos agregados, o simplemente nos enfrentamos a una realidad-verdad tan compleja que por eso algunos católicos siguen sin entender ciertas relaciones con el dinero, las transacciones y los beneficios?".