"Los atentados fueron cometidos por Al Qaeda y, en concreto, por el grupo de Abú Musab al Zarqaui". Las palabras son del viceprimer ministro jordano, Maruán Muasher, que despejó ayer cualquier duda sobre la autoría de los ataques contra tres hoteles de Ammán que el miércoles costaron la vida a 58 personas. Muasher también corroboró que los terroristas no eran jordanos y descartó la presencia de una mujer entre los suicidas.