El cónclave que se abrirá el próximo lunes para elegir al sucesor de Karol Wojtyla comenzará con una larga y solemne procesión hacia la Capilla Sixtina, donde se vota. El desfile será largo y estará formado por todos los cardenales, a los que acompañará el pueblo del pequeño Estado.

Estarán la Capilla Musical vaticana, las autoridades del Estado, los confesores, los alabarderos, los archiveros, el cuerpo sanitario, la prensa acreditada y el comandante de la Guardia Suiza. Luego los electores pedirán la iluminación divina y el maestro de ceremonias dirá: "Extra omnes (Fuera todos)".