Los rostros de los familiares de los 33 mineros atrapados en Chile radiaban de felicidad tras la llegada a la mina de un camión con una cápsula especial de rescate.

La estructura está diseñada para transportar a la superficie a los trabajadores atrapados. El ingenio ha sido bautizado como Phoenix y ha sido diseñado por la Marina chilena para sacar al exterior uno por uno a los trabajadores de la mina, que permanecen desde el 5 de agosto en el interior.

Tres máquinas excavadoras, denominadas Plan A, B y C están ya en funcionamiento para abrir un camino hacia las profundidades lo suficientemente amplio para que pase la cápsula.

Phoenix pesa 420 kilos y tiene dos metros de longitud y dispone de oxígeno y comunicaciones, por lo que los mineros no tendrán problema para moverse y respirar dentro de la pequeña envoltura.