Dos de los diarios más influyentes de EEUU, The Washington Post y The New York Times, arremetieron ayer contra el informe del Ejército sobre las torturas en la prisión de Abú Graib. Primero, por las formas: el texto fue publicado el jueves, el día en que el país estaba volcado en conocer el documento final del 11-S.

Segundo, por el contenido: el informe asegura que las torturas fueron aisladas, culpa sólo a los soldados y dice que sucedieron "por falta de vigilancia". El informe es una operación de "lavado de cara" del Pentágono, según los diarios.