El imán extremista Abú Hamza al Masri ha sido procesado en el Reino Unido por 16 delitos relacionados con actividades terroristas, por lo que no podrá ser extraditado a EEUU. El egipcio, de 47 años, está encarcelado desde mayo en la prisión de alta seguridad de Belmarsh.

Abú Hamza fue acusado ayer de 10 cargos por incitación al asesinato y cinco más por amenazas, insultos y exhortación del odio racial. Ahora bien, la única imputación contra él castigada en la legislación antiterrorista inglesa es un documento que, según la acusación, tiene información "que podría ser útil a una persona que prepare un atentado".

MEZQUITA El clérigo, que reunía a sus acólitos en la mezquita londinense de Finsbury Park, solía pedir la muerte para los judíos y los no creyentes en el islam. Abú Hamza ha negado siempre cualquier actividad terrorista.

EEUU había pedido su extradición, cosa que ponía en aprieto a Londres al no tener garantías de que no sería condenado a muerte. Su proceso paraliza el trámite, hasta que no salde sus cuentas.